
Ante todo respeto cualquier religión y no pretendo ofender a nadie (tras esta pequeña aclaración, comencemos).
Tras leer esta noticia y reirme un rato, he pensado: si, voy a ponerla en el blog, no voy a ser egoista y asi nos reimos todos..
Es bien sabido que entre la iglesia y la ciencia han solido haber discrepancias, y que la religión y la cuestión de orientación sexual no están cortados por el mismo patrón.. pero vaya, que un arzobispo acuse literalmente a los homosexuales de ser los causantes de las catástrofes naturales, me parece que es motivo al menos de plantearse un poco como va el mundo.
José Guadalupe Martín arzobispo de León (México) y presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana durante años, dijo textualmente algunas frases célebres como:
“Ante la violencia, el odio, la venganza y la muerte, ante las iniciativas de ley que afectan la base de la sociedad como es la familia, ante la inseguridad y el sufrimiento de tantas personas es bueno meditar los signos de los tiempos y preguntarnos con los terremotos, las lluvias, las inundaciones, ¿no nos estará hablando el Señor?, ¿qué nos está diciendo con todo esto?”
Hombre, claro está que bajo las irrefutables bases que esta inminencia plantea para cuestionar el origen de las catástrofes naturales (algo que bajo ningún concepto está explicado cientificamente, por supuesto), cualquier ciudadano con dos dedos de frente dirá: oh señor, condena a los infames homosexuales, seres con un alma atormentada por el diablo a pasar el resto de sus días ardiendo en el infierno.. y bueno, ni que hablar de los bisexuales.. oh viciosos insaciables, harán que el mundo llegue a su fin mediante huracanes e inundaciones.. y claro, quien sabe, quizás manden una plaga de langostas para que acaben con nuestras cosechas..
Sinceramente, que quieres que te diga, si ese es el precio que hay que pagar, al menos en el infierno se está más calentito que ahi arriba.
Aunque no se de que me extraño, si ya el obispo auxiliar de Linz, Gerhard Wagner, responsabilizó a las costumbres inmorales y a la tolerancia hacia la homosexualidad, de originar el huracán Katrina.. eso si que es una lección de valores señor Wagner..
¿Que lección podemos sacar de todo esto?
Que cada uno saque la que quiera, pero vamos.. aqui podemos ver como la ignorancia nos hace buscar razones ESTÚPIDAS para causas tan evidentes como el porqué de las catástrofes naturales.
Si dejásemos un poco de lado esa intolerancia que nos caracteriza y fuésemos capaces de no buscarle tres pies al gato, todo iría mejor. Claro, que es más fácil echarle las culpas a un sector minoritario excluido socialmente que ir al fondo del asunto y preguntarse, ¿qué es lo que realmente causa estas catástrofes? claro está que tienen su explicación científica, pero, ¿qué hace que fomenten? ¿debemos reciclar, debemos dejar de contaminar? ¿o quizás debamos meternos en nuestros asuntos y dejar ser felices a los demás?.. en fin, la vida es libre, cada cual con su conciencia.

Interesante entrada :o Da que pensar sobre la ignorancia de algunas personas. Aunque no siempre la religión y el sentido común están reñidos. No soy religioso, pero hace poco escuché la noticia de Mary Glasspool, una mujer de la Iglesia episcopal de EE.UU. que fue nombrada obispa... Esto ya de por sí es raro en un órgano religioso, pero aún más contando que la obispo es lesbiana :)
ResponderEliminarhttp://es.wikipedia.org/wiki/Mary_Douglas_Glasspool
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En fin, religión y ciencia no están reñidos. Solo riñen entre sí el poco sentido común y conservadurismo de algunos religiosos, y personas en general.
Creo que después de enterarte de cosas como la de Mary Glasspool, no puedes evitar esbozar una sonrisa :)
El conflicto ciencia-religión viene de largo y a veces parece que no acabará nunca. En dicho conflicto a veces se discute razonadamente y se crea un debate enriquecedor, pero a veces se dicen tonterías; siquiera insinuar que los desastres naturales son una respuesta de Dios a comportamientos humanos es una de las grandes; primero porque los desastres naturales tienen una explicación científica clara que no necesita nada más para explicarse; segundo, porque esto significaría que tenemos a un Dios vengativo y nada misericordioso, que nada tiene que ver con la idea de Dios que se supone que quieren transmitir, y que dicho sea de paso tienen la mayoría de los creyentes. Así que, efectivamente, es una sandez tanto desde el punto de visto científico como desde el punto de vista de una persona religiosa.
ResponderEliminar¡Claro que si, Carmen! Entonces por tu culpa me moje estas navidades un día... ¡Si no fueras homosexual hubiera llovido menos! jajajajaja Valiente Colgao el arzobispo este...Pa
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